El INGEMM del Hospital Universitario La Paz de Madrid acogió la primera Jornada del Día Mundial de las Lipodistrofias, en la que se reflejó el día a día de los pacientes y sus familiares y se expusieron las últimas novedades en el ámbito clínico y de investigación básica en España. Este acto, celebrado el pasado viernes 31 de marzo, estuvo organizado por la Asociación de Familiares y Afectados de Lipodistrofias (AELIP) y la U754 CIBERER que dirige Margarita López Trascasa.
Fernando Corvillo (U754) expuso los novedosos hallazgos de su investigación, que han permitido confirmar que existe un mecanismo autoinmune relacionado con la pérdida del tejido adiposo en los afectados por lipodistrofias adquiridas. Además, David Araújo, Profesor Titular de la Universidad de Santiago de Compostela, presentó una guía exhaustiva para el diagnóstico y el manejo clínico de pacientes afectados por este grupo de enfermedades raras.
La jornada contó con la presencia del Director Científico del CIBERER, Pablo Lapunzina, y de la Directora General de Planificación, Investigación y Formación de la Comunidad de Madrid, Miriam Rabaneda, así como de la Subgerente del Hospital Universitario la Paz, Mercedes Fernández de Castro.
Las lipodistrofias son un conjunto de enfermedades raras que se caracterizan por la pérdida selectiva de tejido graso subcutáneo. Según la causa que las origina, pueden ser congénitas o adquiridas. Dentro de ellas se clasifican en función de la distribución de la pérdida de tejido adiposo como parciales, cuando afecta a regiones bien delimitadas, o generalizadas cuando afecta a toda el área corporal.
Es un conjunto de enfermedades raras muy difícil de diagnosticar. Muchas veces se confunden con otras como la anorexia nerviosa, la mala absorción intestinal o el cáncer, entre otras. Como consecuencia de la pérdida anormal de grasa, los pacientes con lipodistrofia también presentan alteraciones en los lípidos plasmáticos, y se incrementa el riesgo de que padezcan diabetes, hígado graso y alteraciones cardiovasculares. Hoy por hoy solo existe un medicamento de uso compasivo, la leptina recombinante, con el que se tratan las lipodistrofias generalizadas y algunas parciales y que sirve para regular las alteraciones metabólicas.